El amaranto blanco es una variedad ancestral de granos claros y brillantes, cultivada tradicionalmente en zonas cálidas y templadas de los Andes y el trópico seco. Es reconocido por su alto valor nutricional, especialmente por su contenido de proteínas, calcio y hierro. De rápido crecimiento y gran adaptabilidad, se integra fácilmente en huertas agroecológicas y sistemas sintrópicos como cultivo de cobertura o alimento humano y animal.
Amaranto Blanco (Amaranthus spp.)
- Longevidad de semilla: 3 años
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Tiempo de germinación: 5–7 días
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Altitud recomendada: 800–2.000 m s. n. m.
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Ciclo de cultivo: 90–120 días
El amaranto blanco mejora la estructura del suelo, atrae polinizadores y puede asociarse con maíz o fríjol en sistemas de milpa o huerta sintrópica, fortaleciendo la soberanía alimentaria y la biodiversidad funcional.
Preparación de sopas, coladas, tortas, galletas y granolas; los granos reventados se consumen como “pop amaranto”. Las hojas tiernas también se utilizan en ensaladas o guisos.